Generalmente los bebedores de vinos solían asegurar que les hacía muy bien a la salud, aunque esto muchas veces era solo para no quedar como unos alcohólicos delante de sus familiares o amigos. Ahora estas creencias que se usaban como excusa pueden confirmarse, ya que quedó demostrado que el consumo moderado del vino, en especial el tinto, tiene efectos muy beneficiosos para la salud.
Los científicos finalmente han logrado demostrar las distintas propiedades favorables de esta bebida tales como antioxidantes, anti cancerígenos o antihistamínicas, entre muchas otras. Estos efectos se deben casi principalmente a algunos de los componentes propios del vino, entre los cuales se destacan el resveratol, el principal estilbenos que contiene esta bebida.
Estos estilbenos poseen unas propiedades bioactivas, y según el estudio reciente, el resveratol, es un compuesto que tiene la capacidad de calmar los efectos negativos de una dieta hipercalórica, y hasta aumentar la expectativa de vida de cada persona. Es que mas allá de que este componente sea uno de los mas distribuidos en los vegetales, sus integraciones en las dietas son muy escasas.
Solamente se encuentran en los cacahuetes, algunas variedades de bayas y uvas, en su piel y semillas, asi como también por supuesto, en sus derivados, como en este caso el vino, aunque en cantidades menos abundantes. Mas allá de esto, lo bueno es que este contenido se puede incrementar ya que se trata de fitolexinas, por lo que son inducibles por distintos tipos de estrés, entre los que se destaca el de la luz ultravioleta, que explicamos en este blog hace unos días atrás.
Es así como los investigadores del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (IFAPA), han logrado la obtención de un vino tinto con un gran contenido de resveratrol gracias a su sometimiento a los rayos gama.
