Bodegas Luzon

En 1916 se creó una de las bodegas más grandes que hay en el país. La Bodega Luzon se construyó y se modernizó recién a finales de los 90, pero con una tradición vitivinícola que viene desde hace un largo tiempo. Por ese motivo, se unió el conocimiento, la experiencia y la frescura de un joven equipo.

Los viñedos con los que se cuenta en esta firma tienen unas 3.000 horas de sol al año y muy pocas lluvias. Se calcula que aproximadamente son 300 litros por metro cuadrado anuales con muy bajas temperaturas en invierno y tierras predominantemente calizas de permeabilidad media que llega a los 700 metros de altitud. Las mismas son conocidas como “terruño” que es una mágica combinación entre la composición de suelo, la orientación del mismo y el podado. Además, la climatología en esa zona es realmente excelente para que se pueda tener un viñedo en óptimas condiciones.

Entre las variedades que se puede encontrar en Bodegas Luzon se encuentra Monastrell que es una variedad autóctona y de racimo compacto y de grano redondo. Esta aparece documentada y en el siglo XV. Pero su utilización para poder elaborar los vinos de esta tierra sin duda data de muchas generaciones previas a esta fecha.

En lo que se refiere a la tecnología y la innovación el control de proceso se inició des que se hizo un estudio minucioso sobre la adaptación de las variedades de los distintos tipos de suelos. Esto se completó con el diseño de cada vino en la elaboración de las uvas.

Para concluir, hay que remarcar que el viñedo, la fermentación, la elaboración, la crianza y el posterior embotellado está garantizado por los sistemas tecnológicos más modernos que hay en la actualidad.

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